INCAPACIDAD TEMPORAL (PARTE I)

   Uno de los temas que más genera dudas entre los trabajadores es la incapacidad temporal más conocida como “estar de baja”.

La incapacidad temporal es una causa de suspensión del contrato de trabajo.

    Durante varias entradas intentaré resolver todas las dudas incluyendo algunos ejemplos prácticos, que es como mejor se entienden estos temas.

   Antes de comenzar un inciso: a partir de ahora la situación de incapacidad temporal la denominaremos con las siglas I.T.

   Partamos de una división inicial ya que dependiendo del tipo de I.T. el tratamiento que recibamos en nómina puede ser muy dispar:

Ø  I.T. por enfermedad común

Ø  I.T. por accidente no laboral

Ø  I.T. por enfermedad profesional

Ø  I.T. por accidente de trabajo o laboral

I.T. por enfermedad común o por accidente no laboral

   En estos casos un trabajador puede causar baja por I.T. como consecuencia de una enfermedad que contrae de manera independiente a su puesto de trabajo, p.e una gripe o un sarampión.

   Y en aquellos casos en los que el trabajador causa baja por I.T. como consecuencia de un accidente que no acaece dentro de su horario de trabajo. P.e. si estando en casa se escurre y se rompe una pierna o si tiene un accidente con el coche mientras iba camino del supermercado.

I.T. por enfermedad profesional

   En estos casos el  trabajador causa baja por I.T. a causa de una enfermedad contraída a raíz de su trabajo. Pensemos por ejemplo en un taller de pintura y las enfermedades de carácter respiratorio que se pueden derivar del trabajo en el mismo.

I.T. por accidente laboral

   En estos casos el trabajador causa baja por I.T. a causa de un accidente que se ha producido dentro de su puesto de trabajo. P.e.  Cortarse un dedo con una sierra en un taller de carpintería. Y también a causa de los accidentes llamados “in itinere” es decir,  aquellos que se producen de camino al trabajo o viceversa.

   En las siguientes entradas iré explicando cada una de ellas de forma singular y pormenorizada. Veremos que algunas de ellas tienen similitudes pero también características propias. Y también veremos que aunque a priori parece fácil distinguirlas no siempre va a ser así llegando muchas veces a los tribunales la clasificación de la I.T. ya que las diferencias económicas entre un tipo y otro pueden ser importantes.